El pasado mes de enero, desde este mismo think tank, destacábamos los ocho temas que protagonizarían el debate sanitario en 2022, intentando así vislumbrar los cambios que se requerían para construir el futuro del país en materia de sanidad, tras unos años pandémicos y con desafiantes retos. Un año después, desde Healthinking seguimos con el objetivo de identificar y debatir las tendencias sanitarias, anticipándonos y poniendo encima de la mesa los hitos que están marcando la transformación del Sistema Nacional de Salud.
Por ello, y teniendo en cuenta tanto los planes y estrategias sanitarias impulsadas estos últimos meses, como las conversaciones mantenidas con los distintos expertos procedentes de diversas áreas (atención primaria, farmacia, gestión, organizaciones de pacientes…), empezamos el año poniendo de manifiesto las principales tendencias sanitarias para este 2023.
- La consolidación de la medicina personalizada y de precisión
La Medicina Personalizada y de Precisión es una rama innovadora en la que se maneja el perfil genético específico de un paciente como base para el desarrollo de tratamientos, terapias y fármacos individualizados, de esta forma se dirige el tratamiento a las características genéticas específicas de ese tumor o patología. Este 2023, se pretende consolidar la medicina personalizada y de precisión en el Sistema Nacional Sanitario, e implementar la cartera común de servicios de genómica y la elaboración de un catálogo común en todas las Comunidades Autónomas. De hecho, se destinarán 1.011 millones de euros de la partida sanitaria de los Presupuestos Generales del Estado a su abordaje. Otro ejemplo de esta consolidación es el Plan 5P en medicina personalizada, el cual incluye la implementación de las nuevas tecnologías y equipamiento necesario, el desarrollo de sistemas de información para la implantación de la actualización de la cartera común de servicios del SNS y del correspondiente catálogo, y la creación y consolidación de comisiones autonómicas de genética, entre otros puntos.
- El abordaje de las enfermedades raras
A día de hoy, se han diagnosticado entre 5.000 y 7.000 enfermedades raras o poco frecuentes. Son muchas las personas que conviven con ellas en todo el mundo; más de 300 millones a nivel mundial, 3 millones en España. Los avances científicos, como técnicas de edición genética, han generado grandes expectativas en posibles tratamientos hacia este tipo de patologías. El acceso al tratamiento presenta un problema grave de escasez a todos los niveles en el caso de las enfermedades raras; sólo el 5% de las más de 6.172 enfermedades raras que existen cuenta con tratamiento, por lo que, en términos generales, la escasez es la principal barrera. Los Presupuestos Generales del Estado para el 2023 destinarán 70 millones de euros para el abordaje a las enfermedades raras, especialmente a la ELA.
- La digitalización de la atención primaria
La digitalización y el PERTE de salud de vanguardia, junto con la Estrategia de Salud Digital, suponen una oportunidad única para ayudar a la atención sanitaria primaria a resolver algunos de los problemas que atraviesa desde hace tiempo, recuperando algunas de sus señas de identidad como son la accesibilidad y la universalidad. De hecho, llevar a cabo una transformación digital de la Atención Primaria es una de las metas que ha perseguido el Ministerio de Sanidad a lo largo de este 2022, y con la que continuará en 2023, algo que se ha visto materializado con la presentación del Plan de Transformación Digital de la Atención Primaria. Algunas de las principales áreas en las que implementar y/o extender el uso de herramientas digitales serán la atención personalizada, los procesos de soporte a la gestión, la transparencia y la toma de decisiones basada en datos, y el apoyo a los cuidados de personas con enfermedades crónicas.
- La medición y la evaluación de resultados
La humanización de la atención médica es otro de los principales retos en la transformación del sistema sanitario. Por ello, es necesario disponer de las herramientas suficientes para incorporar, lo máximo posible, al paciente en los múltiples procesos. La medición y evaluación de resultados es uno de los aspectos en los que se debe avanzar de forma intensa para construir un modelo de medicina basado en valor. Hasta ahora, los resultados que más se utilizan son aquellos vinculados a la actividad, a la producción y al presupuesto. Al fin y al cabo, introducir herramientas de análisis de datos, y describir y consensuar indicadores que nos permitan determinar perfectamente qué elementos son los importantes que hay que medir son dos hitos clave a desarrollar dentro del proceso de innovación del Sistema Nacional Sanitario.
- El acceso y privacidad de la historia clínica electrónica
La historia clínica electrónica es fundamental en el desarrollo e implementación de las nuevas tecnologías en todos los campos de la salud, por lo que asegurar su privacidad es una prioridad. De hecho, la Comunidad de Madrid ha aprobado la historia clínica interoperable entre la sanidad pública y la sanidad privada en el Servicio Madrileño de Salud, la cual está regulada bajo dos principios. Se tratan del cumplimiento de la normativa de protección de datos de carácter personal y del consentimiento del paciente, de acuerdo con las regulaciones específicas, los dos pilares para hacer realidad esta medida, y que beneficia a todos los profesionales sanitarios que trabajen en los hospitales de la región.
- De dentro hacia fuera: la salud mental
La salud mental se ha convertido en uno de los grandes desafíos para la sociedad, teniendo en cuenta que 1 de cada 4 personas tendrá algún trastorno mental a lo largo de su vida, o que el 25% de los problemas de salud es de índole psicológico. Por ello, vuelve a ser uno de los hitos clave en materia sanitaria para este 2023. Tras la aprobación de la Estrategia de Salud Mental del SNS para el período 2022-2026, la cual incorpora un enfoque de derechos de la ciudadanía, lucha contra el estigma e integración social dentro de un marco de promoción de la salud mental de la población y prevención, detección y atención a las personas con problemas de salud mental. De hecho, 27 millones de euros en la partida sanitaria de los Presupuestos Generales del Estado irán destinados al desarrollo de
políticas que marca la estrategia.
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